Resumen:
A nivel internacional, la OMPI y las Oficinas de Propiedad Intelectual de distintos países han desarrollado una serie de recursos educativos sobre Propiedad Intelectual para niños y adolescentes, echando mano de herramientas de educación no formal. Lamentablemente, Venezuela no es uno de estos países. Siendo así, ante la imposibilidad de reformar el currículum educativo (al menos de forma inmediata), se plantea la necesidad de crear un instrumento didáctico sencillo que pueda orientar a niños en edad de cursar educación primaria, sobre temas básicos de Propiedad Intelectual en Venezuela. Es fundamental que se comience a pensar a futuro, difundiendo el conocimiento sobre los derechos intelectuales y su aplicación. No se puede esperar adultos respetuosos de estos derechos que construyan una economía creativa, si no educamos a los más pequeños en este sentido. Resulta pertinente preguntarnos ¿por qué se les enseña a los niños sobre recursos minerales renovables y no renovables, pero se excluye la enseñanza de un recurso infinito por excelencia como lo es la creatividad? Cada aporte es importante y se debe aprovechar cada plataforma para colorear de naranja nuestra economía.
